Eran aproximadamente las 5 de la mañana del día 13 de mayo cuando el Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León recibía un aviso sobre el incendio de un camión en la AP-1 a la altura de la salida de Rubena.
Tal y como explicaba el Cuerpo de Bomberos en sus redes oficiales "una vez refrigerado el exterior y rebajada la carga de fuego lo máximo posible" del vehículo pesado, abrieron la caja del camión para poder acceder a todos los puntos calientes y extinguir el incendio en su totalidad. Trabajaron durante tres horas para apagar el fuego originado que se saldó afortunadamente, sin heridos.
"En este tipo de siniestros, ante la posible gran carga de fuego se desplazaron con el vehículo nodriza, que cuenta con una cisterna de 12.000 litros", indicaban en su cuenta de Twitter. Fue necesario emplear herramientas como sierras para poder acceder a la carga ya que el interior era «un horno» según expliacaban fuentes del Cuerpo.